Entrevista a Moisés Ackerman, fundador y gerente general del Grupo MAK

CORRETAJE Y REVENTA NO PASARON POR UN BUEN AÑO

El negocio por excelencia del Grupo MAK viene con MAK inmobiliaria, con 34 años en el mercado, especializada en el corretaje de viviendas. De ahí, nacieron los nuevos negocios que integran el glomerado. «Las cosas estuvieron complicadas en el 2019», dice Moisés Ackerman, gerente general del grupo, quien comentó que se vendió mucho de lo que se construyó, pero la reventa de inmuebles o de venta de locales industriales estuvo parada por la incertidumbre. «Enero, sin embargo, fue bueno, en MAK inmobiliaria cerramos ocho operaciones, un número alto para una temporada de verano», refirió. Así, comentó que han tratado de mejorar procesos para entender la realidad inmobiliaria del país. Como ejemplo, da lo que sucede en La Molina. «Por más buena que sea la propiedad, se va a vender muy barata, por el tráfico. Si no se soluciona, la zona no va a levantar, y eso ha revaluado San Isidro y Miraflore», refirió. En tanto, dijo que la zona de Lima Norte ha ido creciendo, y las ventas se han elevado en el 2019 entre 5% y 10%.

Si bien el 2019 no se presentó del todo bueno, los negocios del grupo han tenido un buen desempeño. Algunos ajustes en ciertos rubros los llevaron a lanzar nuevas marcas y ver las oportunidades que aparecen para tentar nuevos negocios desde el 2021, al igual que más proyectos.

Están en varios rubros. entre ellos, gastronomía. ¿Qué planes tienen este año?

La Vaca Loca ha caminado muy bien, ya con cuatro locales, porque abrimos el nuevo formato en YOY, que nos dio la posibilidad de tener un delivery en la zona. En el Boulevard de Asia abrimos un local, y estamos por abrir en Chiclayo en mayo, en el nuevo Mall Aventura, que es la primera salida a provincias.

¿Ven nuevos locales en Lima?

Estamos viendo otras alternativas. Hacia finales de año podríamos tener un local en Chacarilla. Lo que queremos es sacar una nueva marca bajo nuestros estándares de calidad y producto, siempre en carnes pero con un concepto para centros comerciales.

¿Ya podrían llevar la marca al exterior?

Si Chiclayo marcha bien, en el 2021 vamos a llevar la marca al exterior, viendo, en primera instancia, Chile y Colombia. Más adelante, puede ser España o Estados Unidos, siempre con inversión propia, no creemos en las franquicias. Hemos logrado un local de experiencia y eso nos da la base para salir.

Tenían una marca de comida mexicana…

Tuvimos en Barranco La Catrina, que la reconvertimos porque la comida mexicana no caminó como esperábamos y decidimos actuar. Hoy es un bar de gines, La Gintonería, con 60 tipos de gin, y siguiendo la línea, a fines de año evaluamos abrir un bar similar pero de whiskies.

En hotelería tenían el proyecto en Argentina ¿Hay otros desarrollos ahí?

Es un condominio de lujo que caminó bien. A pesar de que la situación en Argentina no es buena, en San Rafael (Mendoza) el turismo avanzó. Y vemos desarrollos hoteleros pero en Lima. Hoy contamos con el Hotel Soléc que va caminando muy bien, alcanzando una ocupación de 78% el año pasado y en enero de 92%.

¿A dónde llegarían con hoteles?

Evaluamos abrir un hotel en Piura. Estamos en conversaciones para cerrar la compra de un hotel operativo y tenemos un terreno en Colán, donde haremos un nuevo desarrollo, siempre enfocados en el segmento corporativo.

¿Ya es tiempo de llegar a Lima?

El mercado importante en hotelerías es Lima, pero nosotros hemos empezado al revés. En el 2021 ya vamos a ingresar a la capital.

¿El desarrollo de colegios ya se concretó?

Colegios es un negocio ahora en Argentina, en San Rafael. El colegio, con apoyo del Gobierno de Finlandia, se inaugura este mes y vamos a desarrollar un condominio al lado del colegio.

¿Llegarán al Perú?

Uno de los socios tiene la representación para abrir colegios en América, y queremos abrir dos más en ciudades argentinas y luego en Perú, ya que hay una necesidad de educación de alto nivel, bajo un formato más lúdico.

¿Con su marca de decoración y muebles Filamento ven proyectos?

Pese a que se ha dado un poco de retracción en el país, las ventas en Filamento se elevaron 5%, y estamos viendo compañas y promociones para que este año el crecimiento sea de 10%. Queremos abrir un local en La Molina que nos permita atender en esa zona.

¿Nuevos formatos?

Eventualmente, vamos a entrar a la línea de regalos, ya que no hay una oferta como tal en Lima, solo 6 o 7 puntos de venta, y existe un mercado de nicho. Eso nos dará mayor afluencia de público. A mediados de año, debemos traer cuatro o cinco líneas de regalo y nos vamos a enfocar en el segmento AB.

También pensaban entrar en un negocio de canteras…

Sí, estamos terminando de implementarlo y haciendo las primeras pruebas. La ubicación cerca al aeropuerto le da la ventaja principal y la calidad de piedra. El aeropuerto, en principio, será una demanda importante de piedra y tendrá que ser abastecida por todos.

¿Qué tan rentable es este negocio?

El negocio principal ahí es la nivelación del terreno para después venderlo como lotes, son 20 hectáreas al lado de la avenida Gambetta. Hoy el valor en esa zona está entre US$350 y US$500 m2 porque no hay terrenos.

¿Piensan entrar a otros negocios?

Estamos aliándonos con una constructora para aportar terrenos y asociarnos con ello. A las constructoras les está yendo bien, pero la materia prima principal son los terrenos. Este año se lanzan dos proyectos y la idea desde el siguiente año es lanzar un proyecto trimestral.

Fuente: Diario Gestión